Tus genes NO son tu destino
Tenés mucho más poder sobre tu salud de lo que imaginás.
¿Destino o Decisión?
No podés cambiar el ADN con el que naciste, pero sí podés decidir qué parte de tu herencia genética querés potenciar y cuál querés apagar.
¿Cuántas veces escuchaste frases como "mi familia siempre ha tenido problemas del corazón, es genético" o "mi metabolismo es así, no hay nada que hacer"?

Es fácil culpar a los genes y sentir que no tenemos control, pero la realidad es otra: tu ADN no es una sentencia inamovible
Sí, la genética influye. No es lo mismo nacer con una predisposición a la longevidad que con una tendencia a desarrollar hipertensión arterial o diabetes. Pero una predisposición NO significa que estás condenado a enfermarte.
Hoy sabemos que lo que comés, cuánto te movés, cómo dormís y hasta la manera en que manejás el estrés puede activar o desactivar ciertos genes. Es lo que se llama epigenética, el campo que estudia cómo tu estilo de vida afecta la expresión de tus genes.
Y acá viene lo interesante: se ha demostrado que haciendo cambios positivos en el estilo de vida podemos “encender” 🔛 genes que nos protegen de enfermedades y “apagar” 📴 aquellos que favorecen el estrés oxidativo, la inflamación crónica, la aterosclerosis, la lipotoxicidad y otros procesos dañinos.
Este impacto es tan poderoso que se ha evidenciado que mantener hábitos saludables puede aumentar nuestra expectativa de vida hasta 5️⃣ años. ¿Cinco años más de vida solo por cuidar lo que comés, cómo dormís y cómo te movés? Suena increíble, pero es 100% real.
¿Cuánto control tenés realmente?
Mucho más de lo que te imaginás.
De hecho, la ciencia ha demostrado que hasta el 80-90% del riesgo de enfermedades como diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares e incluso algunos tipos de cáncer está relacionado con hábitos y no con la genética en sí.
Mirá este dato curioso: en algunas regiones del mundo casi no existen enfermedades como la arterosclerosis, mientras que en otras son la principal causa de muerte. Si la genética fuera la única responsable, ¿cómo explicamos esto? Simple: cuando las personas migran de un país con bajas tasas de enfermedad a otro con malos hábitos, su riesgo aumenta hasta igualarse con el del nuevo entorno.
No es la suerte. No son los genes. Es el estilo de vida.
El círculo vicioso de la industria farmacéutica
Es irónico, pero las enfermedades crónicas más prevenibles con un estilo de vida saludable son las mismas que más ganancias generan para la industria farmacéutica
Si tenemos tanto poder sobre nuestra salud, ¿por qué la mayoría de los recursos se invierten en tratar enfermedades en vez de prevenirlas?
Hoy, la medicina tradicional sigue priorizando los fármacos y las cirugías en lugar de abordar las verdaderas causas del problema. La industria prefiere vender una pastilla para tratar el colesterol alto antes que promover hábitos que lo regulen naturalmente.
Es una realidad dura, pero lógica: si no cambiás tu estilo de vida, vas a depender de medicamentos el resto de tu vida.
VOS elegís
Cada día, con cada decisión que tomás, estás enviando señales a tu cuerpo sobre qué genes querés activar y cuáles querés silenciar.
🧠 Tu cerebro responde a tus hábitos, moldeando tu salud a nivel genético.
🔥 Lo que comés influye en tu salud más de lo que imaginás.
💤 Cómo dormís puede cambiar la expresión de tus genes.
🚶♀️ Cuánto te movés impacta en tu longevidad.
💆🏼♀️ Cómo manejás el estrés puede activar o apagar la inflamación en tu cuerpo.
No se trata de suerte, ni de genética. Se trata de elecciones.
Yo elijo cuidarme porque me amo.
Elijo que mis buenos genes se expresen y que los dañinos se silencien.
Elijo heredar salud, vitalidad y bienestar.
¿Y vos? ¿Qué elegís hoy?
🤓📚:
https://nutritionfacts.org/video/lifestyle-and-disease-prevention-your-dna-is-not-your-destiny/
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